El soufflé de queso es uno de los platos más conocidos de la gastronomía francesa. Esta receta. Este plato te puede servir para una comida formal, pero también receta de aprovechamiento de quesos abandonados en la nevera.
Lo más destacable del soufflé es que se hincha y duplica su tamaño sobresaliendo del recipiente. Esto se debe a la introducción de calor en la esponjosidad de las claras montadas. Si quieres conseguir un soufflé delicioso, es importante que, en el momento de incorporar las claras a punto de nieve con el resto de los ingredientes, hazlo con mucha precaución. Lo mejor son movimientos envolventes que van a impedir la pérdida de aire que contienen las claras.
También es muy importante no abrir el honor durante el momento de cocción del soufflé de queso. Si lo abres, este se bajaría y no tendría solución.
El soufflé permite distintas variaciones sobre la base de la salsa de bechamel y claras de huevo al punto de nieve. Admite mezclarse con chocolate, frutos rojos y azúcar para convertirse en un exquisito postre o merienda. También puedes añadir ingredientes salados como el jamón, bacón o champiñones.
Aquí te dejamos la receta de un plato de la Belle Epoque que terminará deslumbrando a todos.
Ingredientes
- 100g de queso rallado tipo emmental, gruyere o manchego*
- 5 huevos
- 2 cucharadas de mantequilla
- 50g de harina
- 500ml de leche
- Sal
- Pimienta
- Nuez moscada molida
*Para este receta en particular, te recomendamos un queso emmental suizo La Rueda, Le Gruyere o un queso de oveja Ojos del Guadiana
Cómo hacer soufflé de queso
- Untar la mantequilla blanda en un molde de silicona o de cristal para horno con paredes altas. Resérvalo.
- Preparar la bechamel o utilizar una ya lista. Para realizarla, derrite una cuchara de mantequilla en una cazuela. Añade la harina y remueve bien a fuego lento hasta conseguir una pasta homogénea y espesa que burbujee un poco.
- Incorporar la leche y mueve sin parar hasta obtener una salsa sin grumos y espesa.
- Salpimentar y añadir nuez moscada al gusto.
- Si has optado por utilizar una bechamel ya preparada, salpimienta y añade igualmente nuez moscada al gusto.
- Dejar cocer a fuego lento durante dos minutos más.
- Batir las claras de huevo a punto de nieve.
- Mezclar las yemas de huevo con el queso rallado.
- Unir la mezcla de yemas con la bechamel y añadir las claras montadas. Intégralo todo con una lengua para que las claras no bajen.
- Por último, verter la mezcla en el molde. Hornea durante 25 minutos en una rejilla de posición baja en el horno a 180ºC.
- Servir.
Maridaje
El soufflé de queso es un plato delicado y lleno de sabor, y maridarlo adecuadamente puede realzar su disfrute. Aquí tienes algunas sugerencias de maridaje:
Vino blanco. Un vino blanco seco y refrescante, como un Sauvignon Blanc o un Chardonnay, puede complementar perfectamente la riqueza y la cremosidad del soufflé de queso sin abrumarlo con su acidez.
Vino espumoso. Un vino espumoso, como un Cava español o un Champagne francés, puede agregar una chispa de elegancia y frescura al soufflé de queso, creando un contraste delicioso con su textura ligera y sus sabores intensos.
Vino tinto. Si prefieres un vino tinto, opta por un tinto ligero y afrutado, como un Pinot Noir o un Gamay. Estos vinos tienen suficiente acidez y frescura para equilibrar la riqueza del queso sin dominar su sabor.
Sidra. La sidra es una opción refrescante y sorprendentemente versátil que puede acompañar muy bien al soufflé de queso. Una sidra seca o semiseca puede resaltar los sabores lácteos del queso y limpiar el paladar entre bocados.
Té blanco o verde. Si prefieres una opción sin alcohol, considera maridar tu soufflé de queso con un té blanco o verde suave y floral. La delicadeza de estos tés puede complementar los sabores sutiles del queso y ofrecer una experiencia de maridaje refrescante y reconfortante.
Degustación
El soufle de queso es un plato que no puede esperar. Tienes que comerlo recién sacado del horno. Será tu trabajo calcular cuándo es el momento ideal para comenzar a preparar la receta.
Un buen acompañamiento para este contundente plato puede ser una rica ensalada.